Domingo en el Pueblo
Se ha bañado
Higüey
con las aguas de mayo,
se pondrá su traje de domingo
y se irá a la retreta
del parque
y a una sala de cine.
Volverá a las nueve,
cuando toquen las campanas del templo,
rezará una plegaria
y se acostará
con la conciencia tranquila,
dormirá dulcemente
y se levantará el lunes
al canto de los gallos
para recomenzar su tarea
de construir un mundo justo,
fraterno y santo.
Mayo 1976
Mons. Ramón Benito de la Rosa y Carpio
El Más Bello de los Poemas